OMG, ¡alerta sanitaria mundial!

Algunos artículos (1) ya habían demostrado que podíamos tener algunas dudas sobre los efectos de las plantas genéticamente modificadas en la salud humana. Pero los resultados de la investigación llevada a cabo por el CRIIGEN y dirigida por el profesor Gilles Eric Seralini cuestionan la inocuidad del maíz NK 603 sobre la salud humana (2). La mortalidad de las ratas alimentadas con maíz NK603 es seis veces mayor que la de las alimentadas con maíz convencional. Se observa gran cantidad de tumores en las ratas alimentadas con el régimen transgénico. Un artículo sobre esta investigación controlado por un comité de lectura ha sido publicado por la revista Food and chemical toxicology (3).  La demostración de la nocividad del herbicida Roundup, asociado a este cultivo genéticamente modificado, es también un hecho. Sin embargo, el maíz NK603 había sido aprobado por las autoridades norteamericanas y europeas para su uso en la alimentación humana. ¿Cómo sucedió? ¿Cuál es la magnitud del impacto de los resultados de esta investigación?


Un estudio contradictorio realizado de manera secreta durante dos años.


Esta investigación no se realizó a petición de una autoridad nacional o Europea de evaluación del impacto de esta tecnología de OMG. Se realizó por iniciativa de una organización de la sociedad civil, el CRIIGEN (4) apoyada por fundaciones privadas (5). De hecho, ninguna autoridad pública accedió a financiar dicho estudio como muestra de la real de la falta voluntad política.


Durante años, el CRIIGEN ha intentado comprender los posibles efectos de esta tecnología. Este organismo se ha enfrentado en los últimos años, al igual que otras organizaciones de la sociedad civil, a la presión de empresas transnacionales como Monsanto, que buscan, por todos los medios limitar los estudios de impacto en la salud y el medio ambiente y el acceso a los resultados de algunos estudios ya existentes. Esto lo demuestra brillantemente, Corinne Lepage en su libro "La vérité sur les OGM, c'est notre affaire" (6)  donde explica la razón para la creación de la CRIIGEN, su descubrimiento como Ministra de medio ambiente de la realidad del lobby pro OMG y las dificultades para aplicar, al menos, el principio de precaución mientras ella tenía una posición de responsabilidad.


¿Cómo las empresas han construido su irresponsabilidad?


¿Cómo las autoridades sanitarias nacionales, Europeas y estadounidenses han sido incapaces de visibilizar el tipo de problema revelado por este estudio? No podríamos descifrar esta situación sin comprender la lógica en la que se mueven las empresas de transgénicos con la complicidad de ciertos científicos y políticos. En la directiva europea de 2001, sobre seguridad alimentaria, se estableció la responsabilidad del productor de productos alimenticios. Sin embargo, salvo en un caso, dijo Corinne Lepage, "Cuando el estado del conocimiento científico no conoce la existencia de un riesgo, la directiva permite a los Estados, que lo deseen, excluir la responsabilidad del productor. Esta fue la opción tomada por Francia y la mayoría de países europeos ". Estas empresas lograron, a la luz de los conocimientos actuales, no ser indicadas como responsables por los efectos de las plantas modificadas genéticamente en el medio ambiente y la salud humana. Además, tan pronto como obtuvieron esta autorización de no responsabilidad, hicieron todo lo posible para limitar los estudios sobre los efectos de los OMG. Pero, ¿cómo lo hacen? Prohíben, en primer lugar, la investigación y estudios de OMG que ellos producen. Por otro lado, promovieron el principio de "equivalencia sustancial", que fue tomado por la administración estadounidense y la EFSA (7) a nivel europeo. ¿Cuál es este principio? Un maíz transgénico contiene aproximadamente la misma cantidad de proteínas, carbohidratos y lípidos que maíz no modificado genéticamente. En estas condiciones, ¿por qué someter a las plantas OMG a los estudios de toxicología? Así, las empresas tuvieron la oportunidad de evitar pruebas de impacto en la salud de las ratas que se alimentan de estas plantas OMG. Se han vuelto opcionales, dependiendo de la buena voluntad de estas empresas. Es así, que sólo se han realizado unos pocos estudios para los OMG, durante un tiempo limitado a tres meses, sin diferenciación entre los efectos de aislamiento de modificación genética al del Roundup, un herbicida que acompaña a este maíz OMG. Los estudios realizados nunca consideraron todos los parámetros, sanguíneos, urinarios u hormonales.


Cuando se han realizado estudios, han sido confidenciales. De hecho, sólo los miembros de los comités de evaluación pueden tener acceso a los protocolos de investigación y los resultados. A pesar de que los contenidos están relacionados con la salud humana, se requirió de batallas jurídicas de carácter épico para lograr la publicación de algunos estudios en internet, por ejemplo el del maíz MON863.   
   

Una comisión europea de evaluación a reformar.


La composición de estos comités de evaluación que han sido criticados por muchas organizaciones de la sociedad civil europea, y por diputados europeos incluyendo a José Bové y diputados Verdes. De hecho, muchos miembros de estas comisiones presentan conflictos de intereses.


Además, como señaló Gilles Eric Séralini en la película "OMG ¿hacia una alerta mundial? " el trabajo a realizar es considerable. Se deben leer miles de páginas en un par de días y de manera gratuita... En estas condiciones, las empresas ayudan a la toma de decisiones, haciendo resúmenes. Y en las decisiones de estos comités, a menudo no se revelan los disensos... Es la comisión completa que da una opinión favorable y sin rendición de cuentas precisa. En cuanto a las políticas para manejar los riesgos, se alinean con las decisiones de los científicos de estas comisiones. En estas ciucunstancias, comprendemos un poco mejor cómo, en estas circunstancias, hemos llegado a esta situación escandalosa que avergüenza a la democracia.


El estudio del GRIIGEN, una primicia mundial.


También debemos alabar el esfuerzo, la tenacidad del CRIIGEN y del equipo de investigación de Gilles-Eric Séralini y sus aliados que durante dos años han conducido un estudio polémico y secreto debido a la negativa de Monsanto a otorgar el derecho al CRIIGEN para hacer dicha investigación. Tuvo que realizarse con semilla producida en Canadá y en una institución de investigación en Europa. Es una primicia y un evento global.
 

El libro de Gilles-Eric Séralini "¡Tous Cobayes!" (8), y algunas películas muestran las condiciones y los resultados de esta investigación. Los documentales de François Le Bayon y Clément Fonquerne de Lieurac Productions, sin caer en la acusación, proporcionan claves esenciales para comprender la situación. La película "OMG, ¿hacia una alerta global?" se presentará el 16 de octubre en el canal FR5. Un pequeño documental  de trece minutos "OMG, el momento de la verdad", dirigida por el mismo productor está circulando en la web y redes sociales en diferentes idiomas. Otro film de 90 minutos “los OMG y nosotros” también estará disponible en la web. Ver los tumores producidos por la alimentación modificada genéticamente y el pesticida Roundup genera escalofríos y consternación. La película "¡Tous Cobayes!" de Jean-Paul Jaud que trata también el tema nuclear saldrá el 26 de septiembre. Es un hermoso testimonio y demostración del efecto de estas dos tecnologías que no controlan sus efectos cuando se desarrollan a gran escala.
     

¿Qué hacer en esta situación?


El CRIIGEN pide la prohibición de la NK603 y el Roundup. Resulta necesario en vista de los resultados confirmados en este primer estudio.
Ante una situación tan escandalosa, de bloqueo de la investigación, de secreto e irresponsabilidad, los políticos y los científicos también son responsables. Uno se pregunta si las empresas no conocían este tipo de efectos, en particular.


Dice Joel Spiroux, uno de los investigadores del CRIIGEN, en la película de Lieurac Productions, los efectos sobre la salud humana se han demostrado para este OMG. Todavía resulta necesaria la repetición de este tipo de investigación con éste y otros OMG aprobados o no. Esto tomará tiempo y recursos, significa que se deberán identificar empresas y organismos públicos. Pero resulta hoy una necesidad imperiosa. También será necesario reformar completamente el dispositivo del riesgo a nivel nacional y europeo. La EFSA celebrará su creación en algunas semanas, es una buena ocasión para esta reforma.
   

Es evidente que el principio de "equivalencia sustancial" debe ser abandonado, otros principios utilizados para negar ciertos resultados de algunos estudios también se deben poner en la cesta de la irresponsabilidad: la NO diferencia en los resultados entre hombres y mujeres, el principio de dosis/efecto proporcional.


Los estudios de los posibles efectos sobre la salud de las ratas deben ser realizados durante un período de dos años (aproximadamente equivalente a la vida de una rata) y no tres meses como en la actualidad. Cabe señalar que en este estudio, ningún efecto aparece antes de los cuatro meses ... No es seguro que los intereses económicos de las empresas para producir OMG con tales restricciones legítimas pueden perdurar.


Además, hoy los científicos, políticos y ciudadanos hacen frente a sus responsabilidades. Si algún científico o político desea rechazar los estudios sobre transgénicos ya aprobados o quiere seguir aprobando OMG según los procedimientos actuales, responderá frente a la justicia. Esto, en caso de que se demuestren los efectos sobre la salud de algunos de estos organismos modificados genéticamente. Pero no hemos llegado allí aún.
     

Las repercusiones mundiales


Este estudio también tendrá repercusiones globales. Actualmente, ocho por ciento de las tierras agrícolas está plantada con OMG. Pero las plantas transgénicas suministran el 80% de ganadería de Europa, en particular mediante el uso de soja transgénica. En Francia y Europa, por el efecto de las movilizaciones ciudadanas de los "segadores voluntarios" hemos evitado lo peor, la completa liberación de OMG en los alimentos como es el caso en los Estados Unidos y Canadá.    Esta difusión es importante también en Argentina y en Brasil. En Europa, el etiquetado de los OMG es obligatorio, en Francia los productos que no contengan OMG en los piensos pueden distinguirse mediante el etiquetado "Sin OMG" (9). Esto es nuevo.


¿Pero qué harán los consumidores en los diferentes países? ¿Qué harán las autoridades de los países frente a los OMG producidos en sus territorios o importados? Podríamos tener que gestionar una transición hacia un no-OMG generalizado a nivel internacional. Hay que prepararse a nivel de responsables políticos, agricultores, consumidores de diferentes países de la Unión Europea y organizaciones multilaterales como la FAO para evitar situaciones difíciles para la alimentación del mundo y para hacer frente a la irresponsabilidad, especialmente de las multinacionales en cuestión.

   
Pierre VUARIN
Responsable de programas de la Fondation Charles Léopold Mayer.
Co-creador de la Alianza Internacional Tierra Ciudadana.

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(1) Ver la contra experiencia bioestadística del CRIIGEN realizada en 2005 sobre el maíz Mon863 consultable en el sitio del CRIIGEN. Ver también la síntesis de tres estudios del 2009 en Mon810, Mon863, NK603 www.criigen.org

Ver también el sitio de « responsible technology » centrado en algunos estudios y problemáticas. http://www.responsibletechnology.org/gmo-dangers#.UFDf98cHV90.email
(2) Ver la presentación del estudio como power point en www.criigen.org
(3) Ver el artículo en cuestión en el sitio www.globalmagazine
(4) wwww.criigen.org
(5) La Fundation Charles Léopold Mayer www.fph.ch y la Asociación CERES que agrupa a industriales, ciudadanos y al ex CEO de Auchan Gérard Mulliez, que deseen saber más sobre los efectos de esta tecnología. http://lexpansion.lexpress.fr/economie/gerard-mulliez-dans-l-etat-actuel-des-connaissances-il-faut-interdire-les-ogm_152209.html
(6) « La vérité sur les OGM, c'est notre affaire ! » Corine Lepage . Septiembre de 2012. Editions ECLM www.eclm.fr
(7) EFSA European Food Safety Autority, Autoridad europea de seguridad alimentaria.
(8) « Tous cobayes ? » de Gilles Eric Seralini . Flamarion. Septiembre de 2012.
(9) « Avec ou sans OGM : l’étiquetage décrypté »
por Christophe NOISETTE, septiembre de 2012 http://www.infogm.org/spip.php?article5166